El sistema "casa nido" es un modelo de custodia compartida en el que los menores permanecen en el mismo hogar tras la separación o divorcio de sus padres. En este régimen, son los progenitores quienes alternan su presencia en el domicilio familiar, mientras que los niños siguen viviendo en la misma casa, manteniendo sus rutinas, amigos y colegio. Es un modelo diseñado para priorizar la estabilidad emocional de los menores, ya que evita que tengan que cambiar de casa, escuela o círculo social.
Ventajas del sistema "casa nido":
- Estabilidad para los menores: Los niños permanecen en el mismo hogar, lo que ayuda a mantener su rutina diaria sin grandes cambios.
- Evita el sentimiento de pérdida: Muchos menores experimentan dificultades emocionales cuando deben mudarse de casa constantemente tras la separación de sus padres. Este sistema minimiza esos efectos.
Desventajas:
- Conflictos entre los padres: Aunque los menores se beneficien de la estabilidad, los progenitores deben alternar el uso del mismo espacio, lo que puede generar tensiones y conflictos, especialmente si no existe una buena relación entre ellos.
- Costos económicos: Mantener dos viviendas, la familiar y las individuales de cada progenitor, puede ser económicamente insostenible para algunas familias, ya que requieren recursos para cubrir los gastos de ambas residencias.
Jurisprudencia y opiniones:
El Tribunal Supremo, en su sentencia 61/2020, señaló que este modelo no es siempre compatible con la capacidad económica de los progenitores, ya que mantener tres viviendas (dos privadas y la común) puede ser financieramente insostenible. Además, la rotación de los progenitores en la vivienda común podría generar conflictos adicionales, lo que afectaría la estabilidad que se busca proteger.
Alternativas al sistema "casa nido":
Si el modelo "casa nido" no es viable, existen otras opciones como:
- Venta de la vivienda familiar: El dinero obtenido de la venta se reparte entre los progenitores, quienes buscan nuevas viviendas por separado.
- Uso de la vivienda familiar por parte de un progenitor: Se puede otorgar el uso de la vivienda familiar por un tiempo determinado al progenitor con menor capacidad económica.
El objetivo principal en cualquier opción es siempre garantizar la estabilidad y bienestar de los menores.